La
Alianza de Mujeres Cooperativistas está conformada por cinco
organizaciones de mujeres: Unión de Mujeres de R.L. , Asociación
Nacional de Regidoras, Síndicas, Concejalas y Alcaldesas (ANDRYSAS);
Colectiva Feminista, Mujeres Empresarias Cooperativistas (MEC) y
Asociación Agropecuaria Mujeres Produciendo en la Tierra, (AMSATI DE
R.L.).
La
Alianza comenzó en 2007 con el objetivo de impulsar y defender los
derechos de las mujeres en El Salvador, especialmente en el ámbito
cooperativo, gracias al apoyo de la cooperación sueca mediante el
Centro Cooperativo Sueco hoy We Effect.
A través
del trabajo de formación, el ejercicio de los derechos humanos y
cabildeo con sectores políticos del país, la Alianza ha logrado
empoderar a mujeres para que por sí mismas incidan en cambios
legales y culturales que contribuyan a la modificación de las
relaciones de género entre mujeres y hombres, para lograr la
igualdad.
Como
parte de sus actividades, la Alianza realiza reuniones periódicas de
análisis y reflexión en donde ha quedado en evidencia que los
derechos de las mujeres salvadoreñas legalmente constituidos en el
orden nacional e internacional, se ven vulnerados día día.
Los
objetivos concretos es que se reforme la Ley General de Asociaciones
Cooperativas (LGAC), que a partir de ello se abra la puerta al
establecimiento de la renovación de estatutos cooperativistas, para
que se abra paso a relaciones más justas en la toma de decisiones,
así como a las oportunidades para que también las mujeres puedan
optar en igualdad de condiciones a cargos de dirección en las
federaciones, cooperativas, asociaciones e incluso en cargos
públicos.
El
Salvador es un país con altos niveles de pobreza y desigualdad
social, económica y política, en donde las mujeres representan el
52.7% de la población total, por lo que no se nos debe considerar un
sector más, sino que en realidad debemos ser vistas y atendidas con
políticas públicas; además la labor reproductiva y de formación
de las actuales y nuevas generaciones recae la mayor parte de las
veces en las mujeres, por lo que apoyar a las mujeres es apoyar el
verdadero desarrollo.
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